jueves, 3 de marzo de 2016

Identifica los principales monumentos del prerrománico español

Ermita de Santa Cruz
Fase: Asturiano Estilo: Inicial Época: Siglo VIII Provincia: Asturias Estado de conservación: Desaparecido
Cangas de Onís fue la primera capital del reino asturiano. La iglesia de Santa Cruz, edificada sobre un dólmen en el año 737 por el rey Favila, en un lugar donde ya existían los restos de una iglesia anterior, según constaba en una inscripción fundacional hoy desaparecida, es el edificio más antiguo de este periodo del que nos han llegado noticias. Destruida en varias ocasiones, en su lugar existe una ermita construida en el siglo XX, pero sigue existiendo el dolmen.
 
Santianes de Pravia                                                  
Fase: Asturiano Estilo: Inicial Época: Siglo VIII Provincia: Asturias Estado de conservación: Reconstruido
Construida hacia el 780 por el rey Silo, fue modificada en los siglos XVII y XVIII y restaurada en el XX. Planta basilical de tres naves y un único ábside semicircular, modificada en el S. XVII para convertirla en una cabecera tripartita, con transepto algo más ancho que las naves. Cubierta por techumbre plana de madera excepto el ábside que se cubría mediante bóveda de toba.
 
Cámara Santa de Oviedo                                              
Fase: Asturiano Estilo: Alfonso II Época: Siglo IX Provincia: Asturias Estado de conservación: Reconstruido
Se trata de una iglesia martirial formada por dos naves rectangulares superpuestas, la inferior corresponde a la construcción original y está cubierta por una bóveda de cañón. La superior constaba de una nave más un ábside, aunque la nave fue modificada en el S. XII. Es un antecedente muy claro de la estructura de Santa María del Naranco.
 
Santa María de Bendones                                                    
Fase: Asturiano Estilo: Alfonso II Época: Siglo IX Provincia: Asturias Estado de conservación: Reconstruido
Su planta es un rectángulo en el que se incluyen una nave, una cabecera y un vestíbulo tripartitos y simétricos. Además tenía dos pórticos laterales de los que sólo quedan los restos de uno de ellos en el lado sur. Toda la iglesia estaba cubierta por techumbre de madera excepto el ábside central que tenía bóveda de cañón hecha de ladrillo.
 
San Julián de los Prados                                                      
Fase: Asturiano Estilo: Alfonso II Época: Siglo IX Provincia: Asturias Estado de conservación: Muy bueno
Construida a 1 km de Oviedo, es de planta basilical de tres naves, separados por arcos de medio punto sobre pilares cuadrados con cubierta de madera a dos aguas la central y a una las laterales. Tiene una nave transversal, más alta que la central y con el mismo tipo de cubierta, cabecera recta de tres ábsides abovedados con una cámara secreta sobre el central y un vestíbulo con dos cámaras laterales. Conserva restos de pinturas de gran interés.
San Pedro de Nora                                                    
Fase: Asturiano Estilo: Alfonso II Época: Siglo IX Provincia: Asturias Estado de conservación: Bueno
De planta basilical de tres naves de cuatro tramos, separados por arcos de medio punto peraltados sobre pilares cuadrados con cubierta de madera a dos aguas la central y a una las laterales. Tiene cabecera recta de tres ábsides abovedados con una cámara secreta sobre el central y un vestíbulo que posiblemente tendría dos cámaras laterales.
 
Iglesia de San Tirso                                                   
Fase: Asturiano Estilo: Alfonso II Época: Siglo IX Provincia: Asturias Estado de conservación: Parcial
Destruida por un incendio en 1513, sólo se conserva la estructura general y el exterior de la parte superior del ábside. Tenía planta basilical de tres naves separadas por tres pilares cuadrados a cada lado. Muy interesante la ventana de tres arcos de medio punto enmarcada en un alfiz que, aunque ha hecho pensar que fuera añadida posteriormente en época mozárabe, actualmente se piensa que es original ya que existen otras ventanas con alfiz de época visigoda y asturiana.
 
Santa Cristina de Lena                                                                                                        
Fase: Asturiano Estilo: Ramiro I Época: Siglo IX Provincia: Asturias Estado de conservación: Muy bueno
De una sola nave rectangular, que incluye el presbiterio elevado con una iconostasis de tipo mozárabe y una tribuna, también elevada, sobre el pórtico. Tiene cuatro anejos rectangulares: una capilla mayor, un vestíbulo y dos sacristías laterales. Toda ella cubierta por bóveda de cañón con contrafuertes. Decoración de varias épocas: visigoda, ramirense y mozárabe.
 
Santa María Del Naranco                                                          
Fase: Asturiano Estilo: Ramiro I Época: Siglo IX Provincia: Asturias Estado de conservación: Muy bueno
Se trata de un palacio de recreo, formado por dos naves superpuestas de planta rectangular, ambas abovedadas, con dos miradores, uno a cada lado, en la superior, que forman dos salas en la inferior. Cubierto con bóvedas de cañón sobre arcos perpiaños que corresponden a contrafuertes en el exterior y con una magnífica decoración esculpida de gran armonía con el edificio, significa un gran cambio de estilo respecto a los monumentos anteriores.      
          
San Miguel de Lillo                  
Fase: Asturiano Estilo: Ramiro I Época: Siglo IX Provincia: Asturias Estado de conservación: Bueno
De planta basilical de tres naves pero de puro estilo ramirense, muy distinta a las del periodo anterior. Sólo queda la tercera parte ya que el resto se hundió en la Edad Media por un desprendimiento de tierra. Totalmente abovedada con un sistema muy complejo. Las naves están separadas por columnas, conserva una tribuna sobre
el pórtico y una rica decoración.
 
Fuente de la Foncalada                                                  
Fase: Asturiano Estilo: Alfonso III Época: Siglo IX Provincia: Asturias Estado de conservación: Muy bueno
Es la única construcción civil con fines de utilidad pública del arte asturiano que se conserva. Fue mandada construir por Alfonso III en el lugar, cercano a la muralla, donde se encontraba un manantial de agua potable. De planta rectangular de 4 metros de ancho con forma de templete y un arco central de medio punto. Construida con piedra de sillería de arenisca, está rematada con un frontón triangular en cuyo vértice existe una cruz asturiana de la Victoria.
 
 

Compara la escultura romana y visigoda

La escultura romana buscaba la funcionalidad ante la belleza, al igual que la visigoda, que estaba sometida a la arquitectura, pero a diferencia de la romana esta era mucho más esquemática y carecía de tallas en bulto redondo, hallándose la mayor parte  de las decoraciones en franjas en los capiteles de las columnas en las iglesias y basílicas. Esta decoración en contraste con la roman, la cual representaba la realidad, era estilizada y geométrica aunque sigue manteniendo una fuerte influencia ya que conservan las estructuras basilicales de los romanos, los mismos órdenes arquitectónicos y la iconografía.

La primera imagen se trata de un capitel de una columna visigoda en contraste con el segundo, que es un capitel romano correspondiente con el orden toscano, ya que combina volutas y hojas de acanto.

 
 

Reconoce las claves políticas que llevan a la decadencia del Imperio Romano


Mejor respuesta:  Veamos:

1. El imperio cayó a lo largo de mas de tres siglos, especialmente a partir de su división en las dos administraciones o imperios: el Imperio Romano de occidente con capital en Roma y que cayó el el siglo IV y el Imperio Romano de Oriente con capital en Constantinopla y que cayó en el siglo XIV ( mil años o diez siglos de diferencia )

2. La pérdida de unidad administrativa del primer punto, llevó a la descentralización y esta a la corrupción administrativa ya que el gobierno central perdió control sobre los gobernantes de provincia.

3. La preponderancia y el poder desarrollado por la Guardia Pretoriana que ponía y quitaba emparadores a su acomodo y conveniencia; este factor pasa desapercibido por muchos historiógrafos y olvidan que un imperio gobernando por militares es una dictadura que está llamada a caer tarde o temprano. Si se analizan los emperadores desde los sucesores de Octavio Augusto se ve la mano militarista que acomoda el gobierno del imperio a su particular ambición y los emperadores obedecem fielmente a esas características.

4. La pérdida de la condición ciudadana del romano como tal alrededor de los fines del imperio y de la misma sociedad romana: mientras los romanos manejaron y orientaron a su ciudad y su sociedad hacia fines comunes, Roma y el Imperio creció y fué fuerte y pudo soportar y sortear todas las dificultades que enfrentó, pero en el momento en que esa mística ciudadana se perdió, Roma y el Imperio de Occidente comenzaron a decaer frente a las dificultades. Caso contrario ocurrió en el Imperio Oriental en donde esa mística ciudadana permaneció intacta y firme por mas de mil años mas, porque el imperio mal llamado bizantino era romano en esencia y la cultura romana y la ciudadanía romana se mantuvo intacta hasta el final.

5. Las invasiones bárbaras fueron otro factor determinante de la decadencia. Roma perdió su fuerza al aceptar la influencia de pueblos bárbaros no solo que ocuparon sus fronteras, sino que llegaron a ser parte clave de su administración; a la invasión de los hunos con Atila a la cabeza, Roma tuvo que recurrir a la alianza con pueblos bárbaros como los francos y visigodos que llegaron a tener gran influencia sobre la administración de las provincias del centro-occidente europeo y que permitieron a los pueblos bárbaros que llegaron posteriormente al siglo III no solo ocupar grandes extensiones del imperio sino que facilitaron la toma de Roma y las incursiones que asolaron el imperio a los largo de los siglos III y IV cuando Roma ya era un imperio desmembrado y en plena decadencia.

6. La corrupción administrativa a todos los niveles que llevaron a la administración imperial a una grave crisis financiera y económica con un deterioro de las finanzas publicas, aumento de los impuestos y grandes despilfarros que la llevaron a la quiebra económica y a la ruina.

7. La pérdida de mística y cohesión del ejército que llegó a contar con mas de un 60% de tropas mercenarias de origen bárbaro o romanizadas, sin mística, sin amor por su ciudad y su imperio, sin respeto por los principios ciudadanos del romano ya que no eran ciudadanos y solo eran empleados pagados por el imperio que muchas veces recurrió a compartir el saqueo para pagarlas.

Relaciona el fin del Imperio Romano y la disgregación artística europea

 Una vez que el imperio Romano hubo caído, como consecuencia de  la llegada de los diversos poblados que empezaron a asentarse nacieron nuevas  corrientes artísticas. Así mismo la iglesia ganó un gran peso, cultura, ideológico y artístico reuniendo todas las expresiones culturales y artísticas y convirtiéndose así en quien tenía el control absoluto sobre la cultura. Las manifestaciones artísticas antecedentes al románico pertenecen a un mundo disgregado en múltiples reinos que aportarán algo nuevo y característico a los viejos modelos y recursos clásicos. Esto será conocido como arte Prerrománico.




Compara la pintura visigoda y romana anterior

La pintura visigoda se reducía básicamente a las miniaturas que se hallaban en los códices, escritos en el periodo anterior a la imprenta. Las miniaturas encontradas en ellos se caracterizaban principalmente por su gran expresividad, conseguida a través de un contorno muy marcado, las figuras representadas eran muy rígidas, en ellas cabe destacar el tamaño de las manos para intensificar la tensión espiritual y los ojos. Los fondos suelen ser muy intensos y se encontraban divididos en franjas horizontales



Las pinturas romanas tomaron todas las características de las pinturas griegas. Debido a la pobreza de los materiales empleados en la construcción de edificios, se desarrolló la pintura mural, realizada con la técnica del fresco, con el fin de embellecerlos. En este tipo de pinturas es frecuente que se emplee una amplia gama cromática sumando varios colores más a los ya empleados en las culturas griega y egipcia. Estas pinturas se caracterizan por ser de carácter naturalista y lleno de detalles, aunque siguen manteniendo una cierta influencia de la pintura idealista .

Identifica las principales características de los templos visigodos a partir de fuentes historiográficas de ejemplos representativos.

Las características generales de la arquitectura visigoda son:
  • Los edificios se construyen mediante perfecta sillería, con aparejo de soga y tizón. Los sillares son grandes bloques perfectamente cortados y escuadrados y colocados sin unión por argamasa (a hueso). Las hiladas son irregulares. En ocasiones se usa el ladrillo. Ambos elementos son herederos de la arquitectura romana.
  • La anchura de los muros y la escasez de vanos se justifica por la predilección de la arquitectura visigoda por el empleo de la bóveda de medio cañón.
  • Se emplea el arco de herradura con doble dovela como clave (la denominada "ausencia de clave") y con el trasdós que cae recto a partir de la circunferencia. El soporte usado es la columna y el pilar. Los capiteles pueden ser de orden corintio muy esquemático o el de tronco de pirámide invertido. El empleo del arco de herradura también es una herencia de la arquitectura hispanorromana anterior.
  • Una de las características más peculiares de la arquitectura de estilo visigodo es que el espacio de los templos es muy compartimentado y se emplea gran variedad de plantas, algunas de tipo basilical otras de cruz griega o combinación de ambas. Las cabeceras son planas. Los abovedamientos suelen ser de medio cañón, arista o cúpulas en los cruceros.
  • La cabecera siempre aparece abovedada y termina en testero recto y es frecuente que encima de esa bóveda de cañón surjan unas pequeñas camarillas a las que hay que acceder por escalera de mano cuya finalidad es dudosa. Generalmente también a ambos lados de la cabecera aparecían dos sacristías que a veces comunicaban con el ábside por entradas muy pequeñas. Esto hace pensar que cuando la abertura al ábside es la de un vano de dimensiones normales pudiera ser una sacristía, pero cuando es excesivamente reducida puede tratarse de celdas monásticas en donde los monjes realizaban penitencia. La luz del templo visigodo es muy escasa. Existen pequeños vanos en las naves y algo mayor en el ábside, siempre orientado al este y normalmente con una sola ventana.
  • La decoración de los muros es rica en frisos a base de elementos geométricos o florales repetitivos, tallos ondulantes de vid y estrellas o figuras de animales.
  • Según los textos de San Isidoro la belleza del edificio radica no tanto en la buena estructura o en su distribución como en su adornos y decoración. Para ello se emplearían artesonados de madera dorados, mármoles en los canceles, en las placas, en los muros, en las iconostasis y, por supuesto, en las columnas que separan las naves. Esto hizo que los visigodos se aprovecharan con mucha frecuencia de los materiales de mármol de antiguos edificios romanos. Parece también que las lámparas votivas, los velos, los objetos sagrados, etc., contribuían a esa belleza que era prioritaria en la descripción de los templos del mundo visigótico según San Isidoro.

Relaciona el arco de herradura y su empleo en el arte árabe de la península ibérica

La invasión árabe del reino visigodo en el año 711 llevó consigo un cambio de orientación de los modelos tanto en el ámbito cultural como artístico. Los árabes reutilizaron elementos de iglesias visigodas que se transformaron en mezquitas, adoptando y transformando así elementos de épocas anteriores, como la romana. Un ejemplo de esto es la utilización del arco de herradura.